Por Mariano Tagliotti – periodista y escritor en Tiempo FM, Radio Nuevo Día, Diario Nuevo Día y Diario Tiempo Sur
(jugué, mayoritariamente regular o mal, con honrosas excepciones, 103 partidos en A, 98 en TNA, 356 en Liga B, 132 en Federativos, 19 en Torneo Federal, 43 en Torneos Argentinos de Mayores e incontables en Torneo Local).
El ambiente sabe, que TODO, es prestado. Provisorio. No permanente. De pronta devolución. Eso cala hondamente en la mentalidad, las planificaciones, los afectos. Ese impuesto que no se paga, el muchacho que arregla la conexión eléctrica y le cobra a otro, ese Dr. que te da cita sin hacer la cola. Todo tiene fecha de vencimiento.
El Mercado es chico, pequeño, la torta se concentra en tres o cuatro equipos de la punta de la pirámide, oh casualidad, donde los entrenadores hace 25 años son siempre los mismos 4 que se cambian de silla haciendo todo un aspaviento para la popular. Los Hernández, Lamas, N. García, Duro, G. García son los verdaderos dueños del circo. Tipos inteligentes; se llevan la parte del León, no han corrido un metro picando la pelota en su vida a cancha llena, y la cuenta bancaria la rellenan diciéndole a los demás cómo se juega a un juego que no jugaron. Genios. Figuras. El haber corrido, transpirado, equivocado en una cancha, se paga nada en el ambiente. Esa experiencia, los Dirigentes, que en su 98 por ciento jugaron hasta CADETES, la edad del abandono peleado con el entrenador, se considera una carga más que una virtud.
Difícil armar proyectos de vida, noviazgos, relaciones, cuando se depende del resultado del viernes para seguir teniendo depto en la ciudad o no.
Complejo madurar si te esconden todas las crisis económicas y familiares, si vivís en una Burbuja, porque ”tenés que jugar”.
Harta remontada si el dirigente que te invitaba a comer asado a su casa y dejaba que le mires las piernas a la ”Nena”, TE BLOQUEA DE LA RED SOCIAL PORQUE TE PUSISTE PESADO RECLAMANDO LA TUYA.
Así, la mayoría se vuelven seres volátiles, de un solo sentido, que apuestan el pleno a una ruleta llena de balas. El destino es fracaso con picos de alegría que VALEN UNA VIDA, SÍ, pero de corto alcance. El dirigente sólo quiere que te vayas así devuelve la casa alquilada…….pero te pide que des la sangre, que te metas lesionado al mambo, por los ”colores”. Si pasás a ser ”mercadería dañada”, tu vida será la de un paria. Se perdona todo, menos una lesión grave.
Y luego están los ”EQUIPOS ESTADO”, los rompe mercado, los que pescan con dinamita. Ahí sos directamente una compra por Internet.
Olvídate que tienes alma. Te pagarán y enrostrarán la serenidad que les da cobrar impuestos a otros para dártelos a vos. Y estamos hablando de la elite; de ahí para abajo, Dios se olvida. Es administrar miseria. Casas con 6 o 7 personas. Viandas flacas. Viajes en Traffic eternos. Comida aceitosa. JUGAR CON 60 GRADOS CAMBIÁNDOSE EN UN VESTUARIO SIN AGUA. Baños rotos. Cobro por partido. Jugadores sin seguro. Una travesía en el desierto injustificable salvo que vivas en el lugar y tengas otra entrada y vocación.
Mi consejo a los jóvenes que quieren dedicarse a jugar.Si no sos Ginóbili o Scola, que sólo hubo dos, entre 3.500.000 federados, no pongas todos los huevos en la misma canasta.
Diversificate.
Como emprendedor.
Como estudiante de lo que sea.
No te cases con la pelota. Que es buena y noble, linda, hermosa te diría, pero sólo acepta noviazgos pasajeros, y está llena de pretendientes.
